Antonio Blanco, el primer periodista ciego de España

Nació en Villasarracino (Palencia) y perdió la visión a los seis años.
Estudió en Madrid y, además del título de periodista, logró obtener el de maestro, profesión que ejerció en el colegio de la ONCE de Madrid.
"Me gustaría contar a todo el mundo quién fue mi abuelo Antonio Blanco Pérez". Eso nos dijo un día Judit Victoria Blanco Manresa, una joven lectora de 20minutos.es  de Alcalá de Henares.
La de Antonio Blanco Pérez es una de esas historias de superación que ocurren en tiempos convulsos y que ha caído en el olvido para todos, excepto para su familia. La suya es la historia del primer periodista ciego que hubo en España.

Antonio Blanco nació en Palencia, concretamente en Villasarracino, una localidad situada a unos 57 kilómetros de la capital. Cuando tenía seis años perdió la vista y tres más tarde tuvo que abandonar Villasarracino para poder estudiar en un centro especializado de la capital de España. Sin haber cumplido los 10 años ingresó en el Colegio de la Organización Nacional de Ciegos, lo que hoy en día se conoce como ONCE.
Su constante esfuerzo y afán de superación le permitió conseguir el título de periodista
"Después cursó Bachillerato en el Instituto Ramiro de Maetzu; aprobó e ingresó en la Escuela de Periodismo" nos cuenta su nieta Judit Victoria Blanco.
Su constante esfuerzo y superación le permitió conseguir el título de periodista, convirtiéndose en el primer profesional de la información ciego de España.
Antonio Blanco no se quedó ahí y tras obtener este título cursó la carrera de Magisterio.
Siempre contó con la fiel ayuda de su mujer, María del Carmen González, quien le leía los libros de texto y se los grababa en un radiocasete para que él pudiese aprender las lecciones.
Durante décadas ejerció como profesor en el mismo colegio de la ONCE en el que estudió. No dejó de lado su amor por el periodismo y compaginó la enseñanza de jóvenes ciegos con la dirección de varias publicaciones y de la emisora del centro.
"Creo que su vida y esfuerzo es algo digno de valorar, teniendo en cuenta que todo esto sucedió hace mas de 60 años, cuando no existían los medios que tenemos hoy en día. Pienso que no ha sido lo suficientemente valorado ni se han reconocido sus logros", opina su nieta Judit Victoria Blanco.
Antonio Blanco Pérez falleció 1989. Uno de los pocos recuerdos públicos de su vida es una carta de su puño y letra expuesta en el museo de Juan Ramón Jimenez.
Su nieta no llegó a conocerlo; pero eso no impide a Judit admirar profundamente a su abuelo. "Yo espero seguir sus pasos y llegar a ser periodista algún día" asegura.